Fotografía. Redacción CIgdl
Guadalajara, Jalisco, a 33 años de la trágica explosión que dejó huella en su historia, conmemoró la importancia de mantener viva la memoria de las víctimas y fortalecer las acciones para evitar que hechos similares vuelvan a repetirse. La alcaldesa Verónica Delgadillo resaltó que preservar la memoria de aquel día es una responsabilidad conjunta entre las instituciones y la ciudadanía.
Durante la ceremonia conmemorativa, Delgadillo enfatizó que la tragedia, causada por una cadena de omisiones, corrupción e ineptitud en su momento, debe convertirse en una lección constante para la gestión pública y la comunidad. “Es imposible olvidar, pero sí podemos aprender y actuar para prevenir futuras desgracias”, afirmó.
En su discurso, la edil resaltó los avances en las políticas de prevención, especialmente en un contexto de crecimiento urbano vertical en la ciudad. La colaboración con el comandante Jenny de la Torre, al frente de Protección Civil y Bomberos, ha sido fundamental en estos esfuerzos, junto con la actualización del Atlas de Riesgos, una herramienta esencial para identificar zonas vulnerables y priorizar acciones de prevención.
Delgadillo insistió en la importancia de una gestión municipal cercana a los ciudadanos, atendiendo de manera inmediata los reportes y señalamientos de la comunidad, como los olores a gasolina detectados en colonias como Analco. “Un gobierno presente, empático y comprometido con las necesidades de la gente es la mejor forma de honrar a quienes sufrieron aquella tragedia”,